Si, soy su esposa, al menos en teoría. El muy canalla se fue hace más de un año, aunque no se lo reprocho. Me dijo que necesitaba espacio, que en este pueblo de mierda se ahogaba, que su ambiente rancio y encorsetado y su gente entrometida y zafia, le estaban restando días a su vida, y que su vida, como la de cualquier mortal, era corta y tenía que saborearla de otra manera. Me dijo que lo acompañara, para empezar de nuevo, en otro lugar, pero tuve miedo, y además, nunca creí que fuera capaz de irse…
G. Sayah